Queremos hablar a continuación del término IOT, uno de los más empleados en la actualidad en relación a lo que se ha venido a llamar la transformación digital de las empresas. Este término se forma por sus siglas en inglés (Internet Of Things), que en español sería «el Internet de las cosas» y que hace referencia en realidad a un nuevo concepto sobre cómo se debe producir y cómo se debe cohesionar toda una planta de producción o espacio de trabajo gracias a las nuevas tecnologías con las que contamos. Te ofrecemos una definición de él y te hablamos de sus ventajas, de cómo se implementa y de cómo puede ayudar a tu empresa.
Qué es el IOT
Tal y como hemos dicho, el término IOT viene de sus siglas en inglés (Internet Of Things) y significa en español «El Internet de las Cosas» y se refiere a la interconexión, conjunción y trabajo de dispositivos y objetos en general a través de redes que pueden ser privadas o por Internet y por la que todos ellos permanecen conectados y por lo mismo pueden interactuar entre ellos. Esta conexión se hace a través de sensores, elementos de tipo mecánico (transformadores) y puede incluir por lo mismo toda clase de objetos que, de esta forma, quedan coordinados entre ellos y garantizan una mejor forma de funcionar para toda la planta. Es así que podríamos decir que dentro del término IOT se incluiría cualquier dispositivo que pueda conectarse a Internet y que por lo mismo en último término no requeriría de intervención humana para funcionar.
Es así que este término incluye una interacción entre dispositivos y lo hace de forma máquina a máquina o a través de dispositivos que pueden incluir dicho tipo de interacción. Todo ello genera un entorno donde es posible llevar a cabo la captura de datos de todos los procesos productivos de una planta para tener un bosquejo del estado de la misma fiable y que nos permita tomar mejores decisiones y hacer de todo el proceso algo mucho más eficiente. El uso del concepto IOT tiene como fin último implementar la autonomía de todos los dispositivos de la fábrica y hacer que el funcionamiento de su hardware genere una serie de datos que posteriormente pueden ser organizados, categorizados y analizados por software especializados como los ERP, MRP, etc.
Cómo se aplica el IOT a la industria
El objetivo del IOT es interconectar diferentes dispositivos y en último término poder coordinar, procesar y sacar partido de todos los datos que en ellos se generan. Hay que empezar diciendo que hacer dicha tarea de forma manual es prácticamente imposible. En una planta aparecen cientos de procesos que suceden al mismo tiempo y que afectan a todo el conjunto de la fabricación y que, por lo mismo, son imposibles de controlar de forma global. Por solo mencionar algunos de ellos estarían el número de piezas, las paradas que se realizan, la calidad de la producción, las órdenes de fabricación, etc. Todo ello da como marco una amalgama de procesos que suceden al mismo tiempo y que en la era analógica eran imposibles de controlar. El IOT, como parte de la nueva era y fundamentalmente de la transformación digital viene a subsanar esta carencia.
La recopilación de datos acerca de los proceso de producción de los que hemos hablado puede hacerse precisamente gracias al IOT. En efecto, esta conexión a una red y una transformación de operaciones físicas en datos hace que sea posible controlar cada uno de los procesos y la información asociada a ellos en tiempo real. Es así que a través del IOT se pueden transformar dichos procesos en un análisis mensurable de cada una de las variables de cada uno de los hardware para, posteriormente empleando software especializado poder organizar la información, sintetizarla y establecer pautas y protocolos para ella. Por ejemplo, es posible establecer órdenes automáticas, lecturas e informes sobre la situación y sobre todo tomar mejores decisiones para la producción de la planta en general y su gestión.
Ventajas de utilizar el Internet de las cosas en una planta de fabricación
Queremos hablar ahora de algunas de las ventajas que tiene el uso del Internet de las Cosas para una planta de fabricación y todos los procesos que en ella ocurren.
– Puede obtenerse información sobre la planta en cualquier momento y dispositivo en tiempo real: esta es una de las ventajas más interesantes del Internet de las Cosas. Nos permite tomar informes en todo momento acerca de lo que está aconteciendo en nuestra planta tanto para poder subsanar cualquier problema como para poder tomar mejores decisiones en un menor tiempo. Este control no solo puede hacerse a través de un dispositivo central de la planta de producción sino que puede hacerse desde cualquier que tenga conexión a Internet y los permisos correspondientes para la sesión.
– El IOT nos ofrece información precisa acerca de todos los procesos: en la era digital debíamos trabajar con estimaciones dado que era imposible medir cada uno de los aspectos de la producción. Sin embargo, en la era digital y como consecuencia del control que nos permite implementar sobre el hardware podemos tener información precisa con la que llevar a cabo planificaciones mucho más eficaces y tener informes mucho más precisos acerca de cada proceso. Con ello podemos aumentar notablemente nuestro rendimiento, hacer pruebas para introducir o medir procesos y puntos concretos de la misma y medir el impacto de cada uno de los elementos involucrados en nuestra planta.
– Igualmente, gracias a la eficiencia que introduce el IOT en nuestra planta de trabajo es posible ahorrar recursos en forma de capital y tiempo: tal y como ya habrás imaginado, la introducción del Internet de las Cosas en una planta aumenta la eficiencia de cada una de las variables involucradas en la producción y en su gestión. Gracias a conocer mejor el proceso de trabajo de nuestra planta podemos mejorar su rendimiento en términos de capital y en términos de tiempo. Podemos eliminar elementos superfluos, tiempos muertos y naturalmente ahorrar con todo ello recursos en nuestra fabricación aumentando su rentabilidad.
– IOT hace que toda la planta funcione de forma integrada: como consecuencia de que cada uno de los dispositivos funciona interconectado a todos los demás y toda la información está de forma conjunta integrada, se evitan las llamadas islas de información que consistirían en partes del proceso que quedan aisladas de las demás y sobre las que no es posible hacer una estimación real. El IOT hace que la captura de datos involucre a cada uno de los elementos de la planta.
– Por lo mismo, les hace funcionar de forma coordinada y contribuir a la calidad de dicho datos y a la de todo el proceso de producción. Igualmente, debemos destacar que el IOT hace más partícipe a cada uno de los operarios y partes de un proceso productivo con lo que también aumenta su motivación.
Cómo ayuda a tu negocio la captura de señales en planta
La captura de señales en planta genera información acerca del estado de cada proceso de la misma. Dicha información es sintetizada, procesada y organizada por software especializados que pueden llevar a cabo numerosas tareas entre las que estarían la generación automática de órdenes (aligerando por tanto las labores superfluas de gestión), la emisión de informes o la optimización de cada uno de los procesos a través de la lectura de su rendimiento. En este sentido, es posible contar con software especializados como los de Geinfor que nos permiten llevar a cabo un control más exhaustivo y totalmente adaptado a las características de nuestra planta precisamente porque son construidos por bloques y tienen carácter modular. Eso quiere decir que pueden introducirse con una estructura adaptada a la de nuestro propio sector e incluso a la de nuestra propia planta en particular.
Tal y como venimos diciendo, el IOT es un concepto que forma parte de lo que se ha venido a llamar la transformación digital. Esta idea consiste en el aprovechamiento de los nuevos medios digitales y tecnológicos para poder llevar a cabo la medición de cada uno de los procesos de una planta, comunicarlos e integrarlos a través de dispositivos centralizados o remotos que simplemente necesitan Internet para llevar a cabo la gestión.
Por lo mismo, podríamos decir que el IOT no es ya una ventaja sino una necesidad teniendo en cuenta la gran competitividad que dichos medios tecnológicos permiten a las industrias de fabricación. Es por ello que se deben implementar si se quiere sobrevivir en medio de sectores tan competitivos y en los que cada recurso cuenta y para los que es imprescindible agilizar y optimizar cada uno de los mismos.
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